21/11/08

ÉXODO 5-7

PUNTOS SOBRESALIENTES: Demandas de Moisés a Faraón; Aarón debe hablar por Moisés; la vara de Moisés se conviene en serpiente; la plaga de la sangre.

VERSÍCULO DE HOY: “Jehová respondió a Moisés; Ahora verás lo que yo haré a Faraón; porque con mano fuerte los dejará ir; y con mano fuerte los echará de su tierra” (Éxodo 6:1).

Aunque Moisés acababa de culpar a Dios por los sufrimientos adicionales que habían caído sobre los esclavos hebreos, el Señor no contestó a las preguntas impacientes y acusadoras de Moisés. El solamente reafirmó Su propósito de liberar a Su pueblo.

Faraón había rechazado desafiantemente el permitir que los israelitas dejasen Egipto (Éxodo 5:2), pero el Dios de la creación declaró que Faraón los echaría fuera de la tierra de Egipto.

No había necesidad de sacudir la fe de Moisés ni que él se desanimara por la crítica del pueblo. Las cargas y sufrimientos que experimentaron después de que Moisés le dijo al Faraón que deje al pueblo de Dios salir de Egipto, no tenían que deprimir a Moisés. Dios había dado Su Palabra, y El guardaría Su promesa.

No importa cuanta crítica, amenazas y aun persecución recibamos de alguien, nadie puede torcer los propósitos de Dios: “No hay sabiduría, ni inteligencia, ni concejo, contra Jehová” (Proverbios 21:30). Dios nos ha asegurado que Su Palabra cumplirá lo que El intente llevar a cabo con ella (Isaías 55:11).

Las veces que el enemigo envíe sus feroces dardos de sufrimiento, desilusiones u oposición, recuerde que: “Mayor es el que está en vosotros, que el que está en el mundo” (1 Juan 4:4).

PENSAMIENTO PARA HOY: Nos vencemos a nosotros mismos cuando tememos a las dificultades que nos confrontan.

CRISTO REVELADO: Como el Redentor de la esclavitud del pecado. “Yo os sacaré… y os libraré” (Éxodo 6:6). “Cristo nos redimió de la maldición de la ley…” (Gálatas 3:13; también 1 Pedro 1:18-25).

ÉXODO 2-4

PUNTOS SOBRESALIENTES: Primeros años de Moisés; su huída a Madián; arbusto en llamas; su misión de liberar a Israel; su retorno a Egipto.

VERSÍCULO DE HOY: “Ahora pues, ve, y yo estaré con tu boca, y te enseñaré lo que hayas de hablar” (Éxodo 4:12).
Cuando Dios habló a Moisés acerca de llevar a los israelitas a su libertad, Moisés empezó a poner excusas. Estaba temeroso de ir solo, aún cuando Dios le dijo que iría con él. Solo hasta que el Señor permitió a Aarón que sea el que hablara por él, fue cuando Moisés accedió.

Aunque la elocuencia de Aarón no añadió nada al poder espiritual, Moisés aceptó a ir cuando Dios le aseguró que Aarón, un simple humano como él, iría con él.

¡Qué fácil nos es confiar en alguien o en algo que no sea el Dios viviente! Nos decidimos sin temor cuando somos apoyados por otras personas, aun cuando son tan humanos como nosotros mismos. Los cristianos deberían actuar sin miedo por la Palabra de Dios, sabiendo que Su Espíritu mora en cada creyente (Juan 14:17).

Muchos cristianos han fracasado en obedecer al Señor, dando como pretexto de que no están adecuadamente preparados para tener un ministerio efectivo. Pero toda la preparación académica no sirve a menos que el Señor esté guiando al cristiano enseñándole qué decir. Lo que realmente importa es que El Espíritu de Dios unja lo que digamos, y no cómo lo digamos,”La sabiduría de este mundo es insensatez para con Dios” (1 Corintios 3:19).

PENSAMIENTO PARA HOY: A Dios le importa más el deseo sincero que la elocuencia.

CRISTO REVELADO: Como el “SOY EL QUE SOY” que comisionó a Moisés (Éxodo 3:13-14; compare Juan 8:58; Hebreos 13:8).