Los eventos en el libro de Rut ocurrieron durante el período de los jueces. El propósito del libro es el de revelar que el cuidado misericordioso y providencial de Dios, se extiende mucho más allá de la fe limitada del hombre.
Dios usa la incredulidad de Elimelec para traer a la gentil moabita Rut a Belén. Allí se casó con Booz, un belemita de la tribu de Judá. Su unión fue bendecida con un hijo llamado Obed, Rut y Booz llegaron a ser los bisabuelos de David(4:16-17; 1 Crónicas 2:12-15).
El piadoso Booz no llegó a comprender totalmente lo que se llevaría a cabo al aceptar la responsabilidad como un "pariente cercano" (Rut 3:11-12; compare Levítico 25:23-25). Por medio del matrimonio de Booz y Rut, Dios unió al judío y al gentil como los antepasados de David, el más grande rey de Israel, y como parte de la genealogía de nuestro Señor, el Mesías(Mateo 1:5-6; Lucas 3:31-32).
PUNTOS SOBRESALIENTES: Guerra contra los benjamitas; su derrota; esposas para los benjamitas restantes.
VERSÍCULO DE HOY: "En estos días no había rey en Israel; cada uno hacia lo que bien le parecía" (Jueces 21:25). Debido a que los israelitas fracasaron en reconocer a Dios como su Rey, eran constantemente derrotados por los cananeos, los cuales Dios había determinado que fueran derrotados. Dios era el verdadero Rey de Israel (1 Samuel 12:12); pero cuatro veces en el libro de Jueces, se registran estas mismas palabras u otras similares; "En aquellos días no había rey en Israel; cada uno hacía lo que bien le parecia" (17:6; 18:1; 19:1 ; 21:25). Cuando cada uno hace lo que le parece correcto, habrá anarquía, inmoralidad y engaño de falsas enseñanzas. Cuando la Palabra de Dios es ignorada, como lo fue en la tribu de Dan (Jueces 18), el hombre fue creado con el deseo de adorar a Dios. Pero a menos que él adore de acuerdo a Su Palabra, se encaminará a alguna forma de adoración falsa. "Manteniendo la fe y buena conciencia, desechando la cual naufragaron en cuanto a la fe algunos" (1 Timoteo 1:19).
PENSAMIENTO PARA HOY: El hombre no fue creado para ser el amo de su propia voluntad.
CRISTO REVELADO: Como nuestro Libertador (Jueces 20:26,28). A medida que oramos y buscamos la voluntad del Señor. El libera nuestra carne de las fuerzas del diablo (1 Corintios 10:13).