PUNTOS SOBRESALIENTES: Ezequías destruye ídolos; ofrendas y diezmos; Asiria invade Judá; muerte de Ezequías; reinado de Manasés; reinado de Amón.
VERSÍCULO DE HOY: "Mas luego que fue puesto en angustias, oró a Jehová su Dios, humillado grandemente en la presencia del Dios de sus padres" (2 Crónicas 33:12).
La mayor parte de su vida, Manasés se ocupó de anular la reforma espiritual que su padre Ezequías había llevado a cabo. Manasés llegó a ser un idólatra fanático, y así llevó a su país a la ruina. Debido a ello, Dios permitió que el rey de Asiria derrotara a Manasés y que lo llevara preso a Babilonia.
Durante su cautividad, Manasés se arrepintió; y por primera vez se registra que oró (2 Crónicas 33:12-13). Dios escuchó su oración, perdonó su pecado y lo restauró a su trono en Jerusalén. En sus años restantes trató de hacer enmiendas por sus delitos y dirigió a la nación hacia Dios nuevamente.
Cuando Manasés, un rey muy impío, se arrepintió de sus pecados, llegó a ser un ejemplo del sorprendente amor perdonador de Dios.
Los cristianos más desalentados, derrotados, tienen la seguridad de que Dios muestra gran misericordia por todos aquellos que humildemente se acercan a El.
"... limpiémonos de toda contaminación de carne y de espíritu, perfeccionando la santidad en el temor de Dios" (2 Corintios 7:1).
PENSAMIENTO PARA HOY: Dios en su misericordia ha provisto una salida para que aun el pecador más vil sea salvo.
CRISTO REVELADO: En el diezmo de las vacas y las ovejas (2 Crónicas 31:6). La vaca tipificada a Cristo como el Sirviente paciente y duradero. (Compare 1 Corintios 9:9-10; Hebreos 12:2-3). La oveja tipifica a Cristo en rendimiento sin resistencia a morir en la cruz (Isaías 53:7, Hechos 8:32-35).