10/6/10

JUAN 9 - 10

PUNTOS SOBRESALIENTES: Sanidad del hombre ciego de nacimiento; Jesús, el Buen Pastor; la incredulidad de los judíos.

VERSÍCULOS DE HOY: "Al pasar Jesús, vio a un hombre ciego de nacimiento ... Dijo Jesús: Para juicio he venido yo a este mundo; para los que no ven, vean, y los que ven, sean cegados" (Juan 9:1,39).

Después que Jesús sanó al ciego, los líderes religiosos intentaron volver al ciego en contra de Cristo. Quisieron convencerlo de que Jesús era falso, un pecador. El hombre contestó que no sabía si Jesús era pecador o no, solo que: "Habiendo yo sido ciego, ahora veo" (9:25).

Y dio testimonio más terminante cuando dijo: "... pues esto es lo maravilloso, que vosotros no sepáis de dónde sea, y a mí me abrió los ojos ... si éste no viniera de Dios, nada podría hacer" (9:30,33). Aunque ciego de nacimiento, en su testimonio reveló que tenía mejor comprensión de la verdad y de la luz que los fariseos, quienes podían ver.

El ciego primero creyó en Cristo como un amigo que le ayudaba (9:11), y luego como un profeta y maestro (9:17,30-33). Pero un hombre puede creer todo esto y no ser salvo, por eso Jesús le hizo la pregunta personal más importante: "¿Crees tú en el Hijo de Dios?" Y cuando el ciego supo quién era Jesús, dijo: "Creo, Señor, y le adoró" (Juan 9:35,38).

PENSAMIENTO PARA HOY: Jesús, nuestro Pastor, cuida a Sus ovejas a medida que le seguimos.
REFERENCIA: Para Juan 10:34: Salmos 82,6.

9/6/10

JUAN 6 - 8

PUNTOS SOBRESALIENTES: La alimentación de los 5 000; Jesús camina sobre el mar; Jesús, el Pan de Vida; Jesús en la Fiesta de los Tabernáculos; Jesús perdona a una adúltera; Jesús, la Luz del mundo; verdaderos descendientes de Abraham.

VERSÍCULO DE HOY: "Y como insistieron en preguntarle, se enderezó y les dijo: El que de vosotros esté sin pecado sea el primero en arrojar la piedra contra ella" (Juan 8:7).

La mujer había sido sorprendida en el acto mismo de adulterio. La llevaron a Jesús y la pusieron ante El mientras los escribas y fariseos la acusaban, diciendo: "En la ley nos mandó Moisés apedrear a tales mujeres. Tú, pues, ¿qué dices?" (Juan 8:5).

Las tinieblas espirituales la habían envuelto, pero ahora ella estaba ante "la Luz del Mundo" (8:12). Los líderes religiosos que insistieron en guardar la ley, se fueron cuando la luz reveló el pecado de ellos también.

Jesús no sugirió que lo hecho por ella no fuera pecado grave, no. Solo dijo: "El que de vosotros esté sin pecado sea el primero en arrojar la piedra contra ella". Ella había pecado, y según la ley, debía ser apedreada. Pero, "la ley por medio de Moisés fue dada, pero la gracia y la verdad vinieron por medio de Jesucristo" (1:17). Note usted el énfasis doble: La verdad y la gracia por la otra. La Verdad dice: ¡Apedreadla! Pero la gracia dice: "Ni yo te condeno; vete, y no peques más" (8:11).

Para compartir Su gracia, debemos decir más que: "Te perdono, pero no lo olvido", o , "Confié en ti, y ahora nunca más volveré a confiar". Recibiremos tanta gracia del Señor como estemos dispuestos a mostrar a otros, "... perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo" (Efesios 4:32).

PENSAMIENTO PARA HOY: Saber lo que es correcto y no vivir de acuerdo a ello es pecado.
REFERENCIAS: Para Juan 6:31: Salmos 78:24. Juan 6:45: Isaías 54:13.