PUNTOS SOBRESALIENTES: Dificultades de los justos e impíos; sabiduría mejor que fuerza; los sabios contra los necios; el Creador a ser recordado.
VERSÍCULOS DE HOY: "El fin de todo el discurso oído es este: Teme a Dios, y guarda sus mandamientos; porque esto es el todo del hombre. Porque Dios traerá toda obra a juicio, juntamente con toda cosa encubierta, sea buena o sea mala" (Eclesiastés 12:13-14).
Salomón vivió para complacerse a sí mismo, buscando satisfacer todo lo que su corazón deseaba. No solo cedió sus oportunidades de exaltar el gran nombre de Jehová, sino que miserablemente confesó "Aborrecí, por tanto, la vida" (Eclesiastés 2:17). Salomón terminó su libro con pesar, sabiendo que tenía que enfrentarse a Dios, quien "traerá toda obra a juicio" (Eclesiastés 12:14).
Aunque Salomón sabía que Dios estaba enojado con él porque "hizo Salomón lo malo ante los ojos de Jehová", no tenemos registro de que Salomón se haya arrepentido o que haya pedido a Dios que los perdonara por llevar a la nación de Israel a la idolatría ( I Reyes 11:4-11).
El Rey Salomón es un ejemplo de aquellos que tienen grandes habilidades y que han alcanzado grandes cosas, pero cuyos deseos de placer les han robado el gozo de cumplir la voluntad de Dios para con sus vidas.
Existen muchas cosas que podemos hacer, buenas y que valen la pena y que no son pecaminosas. Pero, como Salomón, podemos llegar a envolvernos tanto con "buenas" actividades que nuestros corazones se desvían de las cosas de Dios. Finalmente, no sólo deshonramos al Señor sino que también nos privamos de recompensas eternas al no gozar de Sus mejores bendiciones para nuestras vidas.
"La que cayó entre espinos, éstos son los que oyen, pero yéndose, son ahogados por los afanes y las riquezas y los placeres de la vida, y no llevan fruto" (Lucas 8:14).
PENSAMIENTO PARA HOY: Obedecer al Señor Jesucristo debería ser el deseo principal de nuestros corazones.
CRISTO REVELADO: En la declaración: "Porque Dios traerá toda obra a juicio ..." (Eclesiastés 12:14). "... sus juicios son verdaderos y justos ..." (Apocalipsis 19:2).