JOSUÉ 17-19

PUNTOS SOBRESALIENTES: Herencia de Manasés; hijos de José reciben más tierra; Tabernáculo establecido en Silo; resto de la tierra dividida.

VERSÍCULO DE HOY: “Y Josué les echó las suertes delante de Jehová en Silo; allí repartió Josué la tierra a los hijos de Israel por sus porciones” (Josué 18:10).

Los israelitas habían cruzado el Río Jordán, habían destruido Jericó, y finalmente, después de siete años de guerra, tenían control de la Tierra Prometida. Pero no todos los cananeos habían sido conquistados. Josué preguntó: ¿Hasta cuándo seréis negligentes para venir a poseer la tierra que os ha dado Jehová el Dios de vuestros padres? (Josué 18:3).

Lo que sucede con las tribus de Israel sucede con los cristianos hoy en día. Prevalece una indiferencia general de obedecer toda la Palabra de Dios. Debemos “proseguir a la meta” (Filipenses 3:14). Esto significa renunciarnos a nosotros mismos y a menudo sacrificar el placer el cual de otra manera nos impediría hacer lo que El nos ha encomendado.

Los cristianos no deberían estar satisfechos con las victorias y los logros pasados; deberíamos estar haciendo continuamente la voluntad de Dios. Esto lo lograremos solamente a medida que comprendamos Su voluntad leyendo Su Palabra. Esto no solamente involucra leer la Biblia y disfrutar verdades nuevas; sino que, el poder transformador es el resultado de un deseo sincero de obedecerlo.

“Pelea la buena batalla de la fe, echa mano a la vida eterna, a la cual asimismo fuiste llamado” (1 Timoteo 6:12).

PENSAMIENTO PARA HOY: El posponer hacer la voluntad de Dios nos priva de ser útil en Su servicio y a menudo ocasiona que lleguemos a ser piedra de tropiezo para otros.

CRISTO REVELADO: Por medio de Silo. “Toda la congregación de los hijos de Israel se reunió en Silo, y erigieron allí el tabernáculo” (Josué 18:1). Silo era el lugar donde moraba la presencia de Dios y fue profético de la venida de nuestro Señor, como fue profetizado en Génesis 49:10, “Hasta que venga Siloh.”