JOB 30 - 33

PUNTOS SOBRESALIENTES: Job proclama su integridad; acusaciones de Eliú.

VERSÍCULOS DE HOY: "Me abominan, se alejan de mí, y aun de mi rostro no detuvieron su saliva ... clamo a ti, y no me oyes; me presento, y no me atiendes" (Job 30:10,20).

Parecía que nunca terminaría la angustia que sufría Job, ni tampoco el desprecio de aquellos que escupieron en su cara mientras se lamentaba en oración. Y por lo que él podía ver, Dios no escuchaba sus oraciones, "Clama a tí, y no me oyes" (Job 30:20).

Una de las dificultades más grandes de un cristiano es orar y seguir orando cuando parece que Dios no lo escucha. Pero la efectividad de nuestras oraciones no pueden ser juzgadas por resultados inmediatos. Existen muchas razones para sus tardanzas. A veces Dios no nos concede nuestras peticiones porque quiere darnos algo mejor. Otras veces nos priva de beneficios materiales para impartirnos discernimiento y entendimiento espiritual. El solo hecho de que nuestras peticiones son a veces concedidas o negadas, es prueba de que estamos siendo cuidados por un Dios de amor, cuyos caminos son gobernados por Su sabiduría y siempre serán para nuestro beneficio.

"... ¡Cuán insondables son sus juicios, e inescrutables sus caminos! Porque ¿Quién entendió la mente del Señor? ¿O quién fue su consejero?" (Romanos 11:33-34).

PENSAMIENTO PARA HOY: Dios da más gracia a medida que aumentaba la carga.

CRISTO REVELADO: A través del ridículo y la aflicción sufridos por Job (Job 30:10-11). Cristo fue afligido y escupido (Marcos 15:15-20; Isaías 50:6; 532-5; Mateo 27:26; Juan 19:1-5).