SALMOS 18 - 22

PUNTOS SOBRESALIENTES: Acción de Gracias por liberación; creación y pactos de Dios; una oración para el pueblo de Dios; alabanza por la victoria; llanto de angustia y cántico de alabanza.

VERSÍCULOS DE HOY: "Ahora conozco que Jehová salva a su ungido; lo oirá desde sus santos cielos con la potencia salvadora de su diestra. Estos confían en carros, y aquellos en caballos; mas nosotros del nombre de Jehová nuestro Dios tendremos memora. Ellos flaquean y caen, mas nosotros nos levantamos, y estamos en pie" (Salmos 20:6-8)-

Para los siervos obedientes a Dios, la oración siempre ha convertido la aparente derrota en victoria. Los "ejércitos" de aquellos que confían en "carrozas y caballos" y dependen de vastos recursos, parecen con frecuencia estar seguros e invencibles. Pero el pueblo de Dios que ora y confía en Su presencia invisible, siempre se levantará triunfantemente mientras que el inconverso será derrotado. La oración produce liberación, pero el orgullo produce la derrota.

Si David pudo orar y luego pudo testificar cómo Dios lo liberó de Saúl y todos sus ejércitos, cuánto más podremos orar nosotros y confiar que Dios contestará nuestras oraciones porque Jesucristo es nuestro Intercesor.

El hecho de que Cristo nos recuerde repetidamente que oremos, comprueba que El conoce nuestros corazones, El sabe que el dudar y desconfiar de Dios es natural en nosotros, y cuán fácil es tender a repetir nuestras oraciones sin esperar una respuesta (Juan 14:13-14; 15:7; 16:23-24; I Juan 3:21-22; 5:14-15).

Antes de que Josafat entrara en batalla con los vastos ejércitos de los moabitas y amonitas, oró, luego nombró cantores para adorar al Señor por la respuesta. El obtuvo una victoria fácil (II Crónicas 20:20-22).

"Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá. Porque todo aquel que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá" (Mateo 7:7-8).

PENSAMIENTO PARA HOY: ¿Se ha acordado de alabar y agradecer al Señor por las victorias de hoy en su vida?

CRISTO REVELADO: Como el Único que fue desamparado por Dios (Salmo 21:1). "Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?" (Mateo 27:46; Marcos 15:34).